OJO DE HORUS
El Ojo de Horus o Udyat: "el que está completo", fue un símbolo de características mágicas, protectoras, purificadoras y sanadoras. Encarnaba el orden, lo imperturbable, el estado perfecto.
No se conoce con exactitud su origen. Desde los primeros tiempos, el Sol y la Luna fueron considerados en Egipto como los ojos del dios Horus, aunque a menudo se les diferenciaba: el ojo izquierdo (Ojo de Horus) era el símbolo de la Luna, mientras que el derecho (Ojo de Ra o de Horus el Viejo) era el ojo del Sol.
A pesar de la incertidumbre en torno al origen y significado de este símbolo, su uso en la iconografía egipcia es extenso y relativamente claro. El ojo fue, ante todo, un mecanismo protector, lo que queda patente en los numerosos Udyat representados en amuletos, joyas, momias, etc.
El interés de los egipcios por la muerte los llevó a embalsamar los cadáveres y a colocar en las tumbas numerosos objetos, pinturas e inscripciones relacionadas con la vida del difunto. Usualmente se pintaban dos ojos en el lado izquierdo de los sarcófagos. Éstos podrían servir como ventanas hacia el mundo exterior para el fallecido y como forma de protección. El ojo sagrado utilizado en los ritos funerarios, esculpido y pintado en joyas, sarcófagos y templos era un poderoso amuleto capaz de despertar al difunto, de guiarlo en su viaje hacia otra vida, de alejar influencias maléficas o de actuar con significado de ofrenda. El ojo de Horus, flanqueado por Nekhbet y Wadjet, fue encontrado bajo el decimosegundo estrato de vendas de la momia de Tutankhamon.
De la misma manera, los ojos de Horus pintados en las proas de los barcos tenían el propósito de protección y guía. El ojo sagrado también apareció representado abundantemente detrás de las imágenes de reyes y dioses como emblema de fuerza protectora. En el antiguo Egipto también se colocaba detrás de las puertas de las casas y en las entradas de importantes templos.
El ojo de horus también fue utilizado por la cultura egipcia como sistema de medida.
Amuleto mágico y talismán
El Ojo de Horus o Udyat, se utilizó por primera vez como amuleto mágico cuando Horus lo empleó para devolver la vida a Osiris.
Según la leyenda, el Dios egipcio Osiris murió asesinado por su hermano Seth. Horus, hijo de Osiris, para vengar la muerte de su padre, mantiene una serie de combates contra Seth. A consecuencia de los enfrentamientos, Horus pierde uno de sus ojos. Thot interviene y entrega a Horus el Udyat para que el Dios pudiese recuperar su vista. El Udyat era un ojo especial, dotado de cualidades mágicas y Horus lo utiliza para devolver la vida a Osiris.
El ojo de Horus (Wedjat, Udjat, Ugiat) es uno de los amuletos más conocidos del antiguo Egipto. Como talismán simboliza la salud, la prosperidad, la indestructibilidad del cuerpo y la capacidad de renacer. Proporciona fuerza, coraje y sabiduría. Sirve para contrarrestar los efectos del mal de ojo, como remedio contra las enfermedades oculares y para proteger ante la mala suerte. El Ojo de Horus es un poderoso talismán contra cualquier maleficio.